Además, el proceso de tomar varias fotografías, elegir la "perfecta", rechazar las que no favorecen y editarlas es un ejercicio de mala imagen corporal, dice la psicóloga infantil Dra. Linda Papadopoulos. Una vez que se completa el proceso, publicamos la foto para que todos la vean y comenten.
"Lo preocupante de este tipo de exposición a las creencias de otros es que no tiene fin", dice la Dra. Linda. “Si lo que los demás piensan o creen sobre ti importa y tu visibilidad no es algo que puedas controlar, entonces tal vez nunca puedas decir con firmeza quién eres. Siempre habrá otro me gusta, comentario o compartir listo para perturbarte”.
En última instancia, un niño podría empezar a sentir que nunca podrá estar a la altura de la selfie que ha creado.
Aplicaciones de edición comunes
Es importante tener conversaciones abiertas con su hijo de forma regular sobre su vida digital. Pregúnteles sobre las aplicaciones que usan, cómo las usan y cómo se sienten. Ser consciente de su espacio digital puede ayudarlos a administrar mejor su propia imagen y bienestar.
Los niños que se sienten negativos acerca de su propia imagen pueden usar aplicaciones de edición para crear una versión idealizada de su apariencia. Algunas aplicaciones pueden usarse simplemente para cambiar los colores o el brillo de una foto. Pero las aplicaciones que pueden cambiar la forma de una cara, hacer que un cuerpo sea más musculoso y requieren más atención. A continuación se presentan algunas aplicaciones de edición ampliamente utilizadas que debe tener en cuenta.