Mírame – Informe sobre adolescentes, sexting y riesgos

“Para algunos adolescentes, la tecnología permite y facilita las relaciones sin causarles daño, pero otros sufren intensamente. Esta complejidad es un desafío a la hora de enseñar seguridad en línea. Debería enseñarse junto con las relaciones saludables y las cuestiones de consentimiento”.

“Compartir imágenes, vídeos o transmisiones en directo explícitas generadas por uno mismo puede ser una señal de que un joven también corre el riesgo de sufrir daños de otras maneras. Quienes alguna vez han compartido su imagen (los que comparten) describen una serie de otros comportamientos en línea y experiencias de agresión en línea que sugieren que también estuvieron expuestos a otros posibles daños, tanto en línea como fuera de ella”.

“Es más frecuente entre los mayores de 15 años, de los cuales el 17% dijo haber compartido una foto de ellos desnudos o con contenido sexual. Pero esto está lejos de ser la situación general, ya que compartir desnudos es mucho más frecuente entre ciertos grupos de jóvenes ya de por sí vulnerables”.

“Se percibe una desconexión entre la visión y los consejos de los adultos sobre el 'sexting' y la visión de los jóvenes sobre 'compartir desnudos'. Como más de 3/4 de los adolescentes que han compartido imágenes dicen que 'no pasó nada malo' después, es posible que ignoren los consejos de seguridad en línea para adultos porque no se ajustan a su experiencia".

“Los padres, tutores y escuelas no reciben consejos sobre seguridad en línea, o los comparten, y su cumplimiento es bajo, si se les da. Solo el 39 % de los que comparten aprendieron a mantenerse seguros en línea gracias a sus padres o tutores, en contraste con más de la mitad de los que no comparten, el 58 %”.